El CrossFit es una forma de ejercicio que promueve la salud y el bienestar general y por tanto no presenta riesgos para la salud. Aunque hay algunos riesgos asociados con el ejercicio intenso, como en cualquier disciplina deportiva, para una persona sin patologías previas hay pocos riesgos para los que lo practican de forma segura, responsable, con la técnica adecuada y siempre bajo supervisión de una persona cualificada. Si se sigue un programa de entrenamiento adecuado, el CrossFit puede ser la mejor herramienta para mejorar la fuerza, la resistencia y la flexibilidad.
De hecho, por lo general el entrenamiento de crossfit es en términos relativos, mucho menos lesivo que cualquier otro tipo de práctica deportiva donde existe contacto físico como puede ser el fútbol, baloncesto, rugby o incluso otros deportes con gran impacto en las articulaciones como el pádel o tenis.
No obstante, incidimos en que si se practica sin el debido conocimiento y cuidado, el crossfit puede ser lesivo para la salud. Por ejemplo, si se realizan ejercicios incorrectamente o sin la debida supervisión, el riesgo de lesiones aumenta significativamente. Por lo tanto, es importante seguir las recomendaciones de un entrenador profesional para evitar posibles lesiones.